Según explicó Marcela Cárdenas, Secretaria Gremial de SOIVA y delegada en la fábrica, los haberes correspondientes a agosto no serán abonados en tiempo y forma, como corresponde al cuarto día hábil del mes, sino que la empresa propuso hacerlo en cuatro cuotas. Frente a este panorama, las trabajadoras y los trabajadores expresaron su preocupación ya que, aun percibiendo el sueldo completo, resulta difícil afrontar compromisos como alquileres, servicios o tarjetas; mucho más con un salario fraccionado.

Cárdenas detalló que la propuesta empresarial fue presentada como una alternativa para evitar una medida más drástica: la reducción del personal a la mitad. En este escenario, las familias se encuentran ante un dilema complejo, aceptar un pago en cuotas que no alcanza para cubrir las necesidades básicas o enfrentar el riesgo de perder el trabajo. “La verdad nadie quiere aceptar algo así, ni nadie quiere de buenas a primera, pero también la gente se pone a pensar de repente, de entre que tengo el trabajo y al no tenerlo, porque también lo que ellos plantearon es que si esto no se aceptaba, por así decirlo, lo que tendría que hacer era reducir la mitad del personal de los que hoy somos, que son 32 personas, 32 familias”, expresó Cardenas.