A través de telegramas de despido, la empresa sostiene que los trabajadores realizaron una medida de fuerza sin acuerdo previo, generando lo que califica como “perjuicios irreparables” en términos económicos y en la cadena de suministro. Según la misiva, la protesta implicó una caída abrupta en la producción, incumplimientos con proveedores y la posible pérdida de contratos clave. Además, Mirgor afirma que la acción violó el acuerdo firmado el 22 de mayo, en el que las partes se comprometían a mantener la paz social mientras continuaban las negociaciones.
La patronal informó que los delegados quedan relevados de prestar servicios “a partir de la fecha en los términos del artículo 30 del decreto 467/88, reglamentario de la ley 23551, con prohibición absoluta de ingresar a la planta en salvaguarda de las personas y bienes de la compañía”. Asimismo, indicaron que el caso fue denunciado ante la Dirección Nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo del Ministerio de Capital Humano como parte de un procedimiento formal de desvinculación con “justa causa”.
Desde la UOM calificaron los despidos como una maniobra de “extorsión empresarial” y denuncian que, a pocos días de la votación para renovar la representación gremial, la empresa intenta “vaciar la representación obrera” y amedrentar a los trabajadores. “Es un ataque directo a la organización sindical”, señalaron desde la seccional Río Grande.