En una entrevista radial, Rodríguez fue consultado sobre la posibilidad de que Washington instale una base en la isla y respondió: “Sí, obviamente, sí, sí, estoy a favor de todas las medidas que toma este gobierno nacional. O sea, si Estados Unidos pide poner una base en Tierra del Fuego, vos lo acompañarías porque es la decisión del gobierno nacional”. Su postura refleja un alineamiento directo con el presidente Javier Milei.

Estas declaraciones se producen en un contexto marcado por sospechas de que el reciente respaldo financiero del Tesoro norteamericano a la Argentina podría haber implicado concesiones estratégicas en materia de soberanía, especialmente en la región más austral del país.

Rodríguez defendió su posición reiterando: “Acompañamos todas las medidas que toma este gobierno nacional porque sabemos que es el único con la capacidad de sacar a la Argentina del pozo”. Sus palabras despertaron preocupación por el desconocimiento sobre la sensibilidad geopolítica de Tierra del Fuego y su cercanía con la Antártida, y confirmaron las advertencias de sectores políticos y sociales sobre la posible entrega de facilidades militares a Estados Unidos a cambio de financiamiento internacional.

El debate trasciende la campaña electoral y pone en el centro de la escena la cuestión de la soberanía en un territorio estratégico, clave por sus recursos naturales, la proyección antártica y el control de rutas marítimas.