Durante la segunda jornada de la huelga, se llevará adelante una nueva Marcha Federal Universitaria, con actos en distintas universidades del país. El objetivo de la movilización es presionar al Congreso para que el próximo 2 de julio apruebe la ley de Financiamiento Universitario, que busca “garantizar el sostenimiento y desarrollo del sistema universitario público argentino”.

La CONADU convocó a toda la comunidad educativa y a la sociedad en su conjunto a sumarse a la protesta, subrayando que se trata de una defensa de la universidad “pública, gratuita, inclusiva y de calidad”.

La iniciativa, respaldada por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), el Frente Sindical de Universidades Nacionales y la Federación Universitaria Argentina (FUA), busca garantizar recursos estables para las universidades públicas. Fue impulsada por sectores de la oposición y rechazada por el oficialismo, que la vetó en octubre de 2024 por su impacto fiscal.

Entre los puntos centrales del proyecto se incluyen:

• Un aumento gradual del presupuesto universitario hasta alcanzar el 1,5% del PBI en 2031.

• La creación de un fondo de $10.000 millones para carreras estratégicas como inteligencia artificial y otras áreas clave.

• Paritarias trimestrales para docentes y no docentes, con incrementos mensuales ajustados a la inflación.

• La actualización automática de los gastos operativos de las universidades según el Índice de Precios al Consumidor (IPC).